Una mala racha
Todos tenemos en mente el concepto de una buena vida o una vida tranquila y sin perturbaciones, y estoy seguro que, en ese mismo sentido, procuramos vivir dentro de nuestros criterios de una vida feliz. Sin embargo, y como resultado de los cambios en nuestro entorno, todos hemos atravesado por malas rachas, situaciones en las que “algo” fuera de nuestro control, altera nuestra situación actual, una situación de calma y tranquilidad; este cambio o alteración, afecta a nuestra estabilidad y por lo tanto afecta la “seguridad” que experimentamos, sustituyéndola por la incertidumbre de “¿y ahora qué hago?”
De acuerdo con la pirámide de A. Maslow, la seguridad es una necesidad básica a conservar, y la alteración a nuestra seguridad, o alguna otra necesidad humana, ¡podría resultar en afectaciones a nuestra salud mental! y vaya que la inestabilidad que causan las malas rachas, pueden ponernos tristes, enojados o frustrados, lo cual no es nada saludable, ni física, ni emocionalmente.
Ante esto, la buena noticia es que: nada está bajo control, que todo lo que creemos estable, podría cambiar en cualquier momento, y por lo tanto, no debemos angustiarnos, al contrario, hemos de reconocer que estamos ante una nueva oportunidad de aprender y volvernos más fuertes, más inteligentes, más experimentados y por lo tanto mejores.
Por eso si estás pasando por una mala racha te recomiendo:
1.- Aceptarla.
Tal vez no te guste, ni querías que esto sucediera, pero ya está aquí, así que reconócela.
2.- Enójate o llora o patalea.
Es una forma de reforzar que estás enfrentando una mala racha y es mejor reaccionar ante su llegada que tratar de ignorarla y negar la realidad, por triste que está resulte.
Ahora lo más importante:
3.- Encuéntrale un nuevo sentido de reto y aprendizaje a la situación y afróntala
El pasado no lo puedes cambiar; pero si puedes modificar la forma en que habrás de interactuar con una “nueva” realidad, ante las nuevas circunstancias que te toca vivir.
4.- Finalmente, haz CONCIENCIA y recuerda que: a la vida venimos a ser felices y si hoy pasas por un mal momento, acepta que es solo eso: una mala racha, tan sólo un mal momento y no toda una mala vida.
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