top of page

¡Dale tiempo a tu pareja!

Cuando iniciamos una pareja, lo principal es pasar tiempo juntos, compartir actividades y conversaciones que nos permiten conocernos y enamorarnos. Conforme avanza la relación, muchas veces estos tiempos se van restringiendo hasta que pueden volverse mínimos cuando compartimos vivienda o formamos una familia.



Erróneamente pensamos que como ya compartimos el techo, o actividades como el cuidado de la casa y de los hijos, eso es suficiente convivencia… nada más lejos de la verdad.


Es muy importante tener tiempos de pareja, por breves que sean, para poder mantener una relación verdadera… y es que tomar decisiones juntos acerca de cómo pagar las cuentas o convivir con los amigos y la familia no son verdadero tiempo de pareja.


En esta época, en que el trabajo nos consume la mayor parte de nuestro tiempo y energía, debemos poner mucho cuidado en asignar tiempo a todas las relaciones importantes, comenzando por nosotros mismos, pero también pasar tiempo con nuestra pareja, tener algún espacio que no implique tomar decisiones, asumir obligaciones, sino simplemente convivir, compartir como al inicio, cómo se siente cada uno, cómo está viviendo este momento, qué desea de la vida, en fin, para seguirnos conociendo y uniendo.


¿Cómo podemos lograr esto?

Existen varias maneras de lograrlo. En primer lugar es importante que ambos consortes estén de acuerdo en la importancia de tener tiempo juntos.


De igual forma es deseable que se asigne un presupuesto para ello, y no es indispensable que sea una gran cantidad, pero ir por un café a la tiendita no desfalca a nadie y puede acompañar una plática muy interesante. Ahora que si el bolsillo lo permite, una cena o una escapada por supuesto que son bienvenidas.


En seguida es crucial asignar un tiempo. Así como tenemos horarios para trabajar o para asistir a alguna clase, al inicio, aunque suene artificial, hay que generar un horario para el tiempo de pareja. Se puede iniciar con algo tan breve como una hora el jueves o viernes por la noche, y gestionar lo que sea necesario.




De preferencia que sea fuera de la casa, ya que es inevitable atender el pedido de un hijo o tomar una llamada de los parientes. Es mejor pedir que alguien se encargue de los niños en ese rato, incluso pueden hacerse “rondas” entre grupos de papás para que cada quien cuide a los chicos una vez al mes y las otras semanas disponga del tiempo para pasar en pareja.


Finalmente, es muy probable que al inicio, si hemos descuidado este tipo de convivencia, no sepamos qué hacer o de qué hablar.


No te preocupes, también eso hay que planearlo las primeras veces; poco a poco iremos recuperando la espontaneidad como en esos primeros días del romance.

Espero que este artículo te sirva para fortalecer tu vínculo de pareja.


Sé feliz, que para eso estamos vivos.


Archivo
Buscar por tags
bottom of page