Productivos o empantanados.
¿Te ha pasado alguna vez que, comienzas tu día, sacas todos tus “pendientes”, haces llamadas telefónicas, entregas reportes, terminas, y cuando te detienes a observar que más falta, apenas han pasado dos o tres horas?
Por otro lado, todos hemos tenido esos días en que dedicas tiempo a realizar una actividad, que no parece tan complicada, pero que después de varias horas (o incluso días) sientes que no has avanzado como deberías ¿te suena familiar esta segunda situación?
Si al primer escenario lo llamáramos: “Momentos Súper-Productivos” y a la segunda situación “Momentos empantanados” ¿cuál de las dos situaciones te parece más atractiva? ¿en qué situación te parece más agradable, realizar tus actividades diarias?
Casi estoy seguro que la respuesta es: Momentos Súper-Productivos. Y es que, recordemos, cuando has estado en ese momento, fluyes de manera provechosa, las actividades parecen muy sencillas, la creatividad surge y las alternativas de solución parecen infinitas y simples; es una sensación muy similar a cuando eras niño y al jugar podías “brincar” de una situación a otra, sin complicaciones; en este Momento súper-productivo, todo se vuelve divertido y hasta pareciera que, lo que haces, es tan sencillo porque dispones de un gran poder; ¿no es cierto?
Bien, la verdad es que todos disponemos de ese gran poder, y éste es: la motivación; ya que, esta es la que nos impulsa a la realización de nuestras tareas; motivación tiene su origen en: MOTO (movimiento) y ción (acción); por lo tanto, la motivación nos mueve y nos pone en acción; solo que, algunas ocasiones al estar “empantanados”, nos desesperamos, nos enojamos o nos frustramos y eso hace que caigamos en un círculo vicioso donde:
Me frustro -> me enojo -> pierdo motivación y por lo tanto, me frustro y otra vez me enojo, me desmotivo, y así de manera interminable.
Bien, la invitación entonces es, a recuperar la motivación, puesto que ya sea que estés en el trabajo o que estés haciendo algo personal, la verdad de las cosas es que hay ocasiones en que tenemos que realizar tareas que no nos gustan y que por lo tanto no disfrutamos, y eso nos lleva a “empantanarnos” a propósito, con tal de no realizar dichas tareas; entonces, si queremos más momentos Super-productivos, basta con hacer un pequeño cambio y reencontrar la motivación.
¿Cómo reencontrar la motivación? Al caminar un poco, leer un chiste, estirarse, cantar o dar unos cuantos saltos, para que experimentemos una sensación diferente, y al cambiar el estado interno en el cual nos encontramos, es más fácil recordarle a nuestro cuerpo y a nuestra mente, el por qué y para qué de dicha actividad, trayendo a la CONCIENCIA nuestra motivación.
¿Qué otra alternativa nos puedes compartir para encontrar la motivación? Manda tus comentarios y sugerencias, y que tengas un día Súper-productivo.
