El Sencillo y Poderoso Secreto de Amarte a Ti Mismo
La autora se encuentra terminando un libro titulado El Juego de Tu Vida, cuyo tema central es el despertar de la conciencia desde una forma practica y sencilla.
Amarte es más sencillo de lo que crees, es tan simple como no juzgar, no criticar, no señalar y no insultar a nadie, por que la energía siempre regresa al emisor, es decir lo que emites recibes, es la Ley Universal.
Si tú juzgas estas pidiendo ser juzgado, si tú criticas estas pidiendo ser criticado, si señalas estás pidiendo ser señalado y si insultas, estás pidiendo ser insultado… es como escupir para arriba.
Juzgar y criticar a los demás es un deporte nacional, sin saber el daño que nos hacemos a nosotros mismos, por eso existe una frase de todos conocida, Buda nos dice:
“Tienes algo bueno que decir...dilo, si no es mejor que guardes silencio”.
Si lo que vas a decir es algo bueno, DILO, ya que esto volverá a ti multiplicado, pero si lo que vas a decir no es bueno, CALLA, ya que también volverá a ti multiplicado.
Para tu subconsciente no hay otros, tu subconsciente interpreta que todo lo que vibras y expresas a través de tus pensamientos, emociones y palabras, deseas experimentarlo en tu vida.
Una referencia de lo anterior la encontramos en Isaías 55:11:
...Así será mi palabra que sale de mi boca, no volverá a mí vacía sin haber realizado lo que deseo, y logrado el propósito para el cual la envié.
Creer que lo que pensamos, sentimos y opinamos de los demás no nos afecta a nosotros mismos es la peor locura en la que vive hoy la humanidad.
Si tu frecuencia vibratoria es de amor y sabes usar como espejo a los demás aprenderás el juego de amarte a través de su reflejo, ya que tu energía solo te afecta a ti, los demás son para tu subconsciente un espejo donde puedes amarte o lastimarte.
La energía de los demás no puede hacerte nada, no es tuya, no te pertenece.
Si aprendes a respetar esta simple regla, estarás amándote y prepárate para vivir experiencias donde la vida te haga sentir amado por todos los que te rodean.
Ese es el verdadero amor por uno mismo, simple, poderoso y absoluto.
